Integrated Design Process: qué es y cuáles son las ventajas
Integrated Design Process es el método que te permite gestionar proyectos de forma integrada y colaborativa obteniendo un rendimiento óptimo. Descubre las ventajas
Calidad, funcionalidad, seguridad, eficiencia energética, sostenibilidad… el número de requisitos que hay que cumplir en el diseño de las nuevas obras de construcción ¡es cada vez mayor!
Para hacer frente a los desafíos de la construcción moderna, es necesario concebir un proceso de construcción eficaz y funcional, que sea capaz de considerar la interacción entre los diferentes factores en juego.
El Proceso de Diseño Integrado responde perfectamente a esta necesidad, estableciéndose como un enfoque integrado para el diseño, respaldado por la cooperación entre los diferentes profesionales involucrados.
Descubramos juntos cuáles son las potencialidades de este método y cómo la metodología BIM puede apoyar la gestión integrada de los proyectos.
Qué es el proceso de diseño integrado
El Integrated Design Process (IDP) es un enfoque de diseño interdisciplinario basado en la colaboración de las partes involucradas en el proceso de diseño, construcción y gestión de una construcción.
Este método se utiliza sobre todo en el ámbito de la construcción ecológica, ya que permite mejorar considerablemente las posibilidades de éxito de los proyectos de edificios de alto rendimiento.
La participación activa de todas las partes interesadas permite, de hecho, buscar soluciones óptimas, innovadoras y sostenibles, en relación con todo el ciclo de vida del edificio.
Pero en realidad, el IDP es un enfoque extremadamente flexible, por lo que se puede aplicar de manera efectiva en cualquier contexto, y a cualquier tipo de proyecto o proceso de toma de decisiones.
Por supuesto, las fases y estrategias específicas que se adopten estarán directamente relacionadas con la intención del proyecto, que no solo difiere entre los proyectos, sino que también cambia continuamente a medida que el sector evoluciona.
Cuáles son las diferencias entre IDP y los procesos de diseño convencionales
Los procesos de diseño tradicionales presentan una estructura lineal que se desarrolla según una secuencia ordenada de pasos, en los que se prevén las siguientes modalidades operativas:
- las disciplinas de diseño (arquitectura, estructuras, instalaciones, etc.) se consideran por separado, como sistemas aislados;
- las diferentes figuras involucradas intervienen sólo cuando es necesario y las decisiones son tomadas por un número limitado de partes interesadas;
- se dedica poco tiempo a las actividades de planificación y diseño, con repercusiones negativas en las fases sucesivas;
- se reducen las posibilidades de optimización;
- el proceso finaliza con la fase de construcción de la obra.
El Integrated Design Process se opone claramente a los criterios descritos anteriormente, ya que:
- rechaza los procesos lineales de planificación y diseño que pueden conducir a soluciones ineficientes, y adopta un sistema iterativo que considera las interacciones continuas entre los diferentes sectores;
- hace hincapié en las conexiones entre las diversas disciplinas y mejora la comunicación entre los profesionales y las partes interesadas durante la duración del proyecto;
- las decisiones se toman de manera compartida por todos los participantes en el proceso;
- resalta las conexiones entre las distintas disciplinas y mejora la comunicación entre los profesionales y las partes interesadas a lo largo del proyecto;
- aumenta la optimización y minimiza los riesgos de retrasos, cambios en el trabajo y los sobrecostes;
- el proceso continúa incluso después de la fase de construcción de la obra, para una Facility Management más eficiente.

Diferencia entre el diseño tradicional y el proceso de diseño integrado
Cómo implementar un proceso IDP
Para implementar correctamente un proceso de diseño integrado, es aconsejable:
- definir de antemano los objetivos a alcanzar, para evitar cambios en las fases futuras de diseño;
- formar un equipo de trabajo multidisciplinario, capaz de buscar estrategias integradas para mejorar el rendimiento general del proyecto (por ejemplo, incluir a los operadores de la construcción en el proceso de diseño garantiza que se compartan sus competencias, mientras que incluir a los usuarios finales garantiza que se satisfagan plenamente sus necesidades);
- organizar «charrette», es decir, talleres (entendidos como períodos intensos de actividades de planificación o diseño) que deben ser dirigidos por un facilitador experto y deben incluir a todas las partes interesadas (propietario, profesionales, contratistas, etc.). Un charrette ofrece la oportunidad de unificar el equipo del proyecto y reunir las contribuciones de todos los participantes, trabajando por un objetivo común. Además, son indispensables para desarrollar soluciones óptimas a los problemas de diseño y establecer secuencias de tiempo para la finalización del proyecto;
- utilizar herramientas, software de modelado y colaboración para apoyar y fortalecer la integración del proyecto. Entre las herramientas que facilitan una toma de decisiones eficaz y que encajan a la perfección con los PDI, la metodología BIM desempeña un papel fundamental. Tratemos de entender por qué.

Principios para la correcta implementación del IDP
Cómo el BIM apoya el Proceso de Diseño Integrado
La metodología BIM representa uno de los factores de soporte más importantes para un diseño integrado exitoso.
El uso de BIM en el IDP, de hecho, permite integrar la información de los participantes en el proyecto relacionada con las diferentes disciplinas, que tradicionalmente operan en fases distintas del proceso de construcción.
Además de garantizar una colaboración eficiente entre las figuras involucradas (clientes, diseñadores, constructores, usuarios finales, mantenedores, etc.), la metodología BIM también permite:
- integrar en un único modelo la información útil en cada fase del proyecto (arquitectónica, estructural, de instalaciones, energética, de gestión, etc.);
- considerar todas las dimensiones asociadas al proyecto (tiempo, costes, mantenimiento, sostenibilidad, etc.) y desarrollar adecuadamente todos los procesos relacionados;
- ir más allá de la fase de planificación y diseño, para gestionar todo el ciclo de vida del edificio;
- garantizar un alto control del proceso mediante controles de coordinación y validación adecuados.
Para asegurar el éxito de su IDP, pruebe el software de BIM Coordination que te permite facilitar la comunicación con otras partes interesadas, optimizar los flujos de trabajo y mejorar la calidad general del proyecto. Con una única solución online e integrada podrás compartir datos e información, realizar clash detection, code checking y coordinar todas las actividades de tu proyecto.
Cuáles son los beneficios del IDP
Un proceso de diseño verdaderamente integrado nos ayuda a:
- identificar los conflictos en la fase preliminar del proceso, y reducir los imprevistos en la fase avanzada de diseño o durante la realización de la construcción;
- mejorar la colaboración y la comunicación entre los profesionales y las partes interesadas;
- reducir el tiempo y los costes de realización;
- garantizar un mayor control del proceso;
- aumentar las posibilidades de alcanzar los objetivos previstos;
- aumentar la eficiencia de la fase de construcción;
- garantizar la correspondencia entre la fase de proyecto y el resultado final;
- mejorar la calidad general del proyecto y lograr un rendimiento óptimo;
- facilitar la gestión y mantenimiento de la construcción.