Emergency maintenance: qué es, tipos y ejemplos
El Emergency maintenance, o mantenimiento de emergencia, interviene con carácter de extrema urgencia cuando un bien sufre una avería imprevista. Descubramos juntos la definición y los tipos.
Si eres un profesional del sector AECO seguramente habrás tenido que hacer frente a una avería imprevista en un activo, con carácter de absoluta urgencia.
Bueno ¡no eres el único!
Desafortunadamente, este tipo de imprevistos pueden surgir cuando se trata del mantenimiento de un activo y la actuación resultante tiene un nombre muy concreto: emergency maintenance.
Descubramos juntos cuántos tipos existen, qué pasos seguir y qué programa GMAO utilizar para que no te tomen por sorpresa.
¿Qué entendemos por emergency maintenance?
El emergency maintenance, en español mantenimiento de emergencia, es el tipo de mantenimiento que es necesario realizar cuando un activo o una parte de él sufre una falla o un mal funcionamiento no previsto. Esto podría representar un peligro para la seguridad de los usuarios y, por lo tanto, es necesaria una intervención de emergencia.
Al tratarse de una emergencia, está claro que este tipo de mantenimiento no forma parte de los mantenimientos programados. Sin embargo, un plan de mantenimiento bien pensado también incluirá un plan de contingencia para hacer frente a fallas inesperadas.

Emergency maintenance workflow
¿Cuáles son los ejemplos de mantenimiento de emergencia?
En la fase de gestión de un activo, los casos en los que es necesario intervenir con mantenimiento de emergencia son muchos y dependen en gran medida de las condiciones límite. Si, por ejemplo, se daña un ascensor, este mismo evento puede requerir o no una intervención de emergencia en función de la circunstancia específica. Si el ascensor está bloqueado sin personas en su interior, la intervención de mantenimiento no se clasifica como intervención de emergencia. Por el contrario, si el ascensor muestra una falla y hay personas atrapadas dentro de él, entonces la intervención ciertamente tendrá un carácter de emergencia.
En general, se pueden clasificar algunos escenarios comunes que requieren la activación del mantenimiento de emergencia, y son:
- la aparición de un fallo que pueda suponer un peligro para la seguridad, un ejemplo sería el ascensor que hemos mencionado antes;
- la ocurrencia de una falla que provoque la inutilización imprevista de todo el activo, a la interrupción de la producción o a la interrupción de un servicio (falla del sistema de HVAC);
- la interrupción automática del servicio por motivos de seguridad. Cuando, por ejemplo, se produce una avería que podría afectar al resto de la instalación.
¿Cuáles son los tipos de mantenimiento de emergencia?
Los tipos de mantenimiento de emergencia se clasifican según el origen de la notificación de avería, que puede ser enviada automática o manualmente.
Tenemos por lo tanto:
- mantenimiento de emergencia automatizado: en caso de avería o mal funcionamiento, detectado automáticamente. El sistema actúa de forma automática interrumpiendo, por ejemplo, la producción, el suministro de energía o iniciando un proceso automático de intervención sobre la avería;
- respuesta de mantenimiento automática: en este caso, se activa automáticamente un protocolo de intervención de emergencia en respuesta a un fallo grave. El ejemplo de la falla de un ascensor, hecho anteriormente, podría entrar en este escenario;
- solicitud manual de intervención: en este caso, el informe de avería y la solicitud de intervención la realizan los usuarios o el personal in situ.

Tipos de emergency maintenance
¿Cuál es la diferencia entre el mantenimiento de emergencia y el mantenimiento reactivo?
Tanto el mantenimiento de emergencia como el mantenimiento reactivo requieren una intervención después de que se haya producido una avería, para restablecer el activo a su estado operativo inicial. Sin embargo, es precisamente el carácter de urgencia de la intervención lo que distingue los dos tipos de mantenimiento, que depende del tipo de avería y de las condiciones específicas en las que se produce.
La diferencia fundamental, por lo tanto, entre los dos tipos de mantenimiento consiste en:
- cuando se produce la avería;
- qué tan urgente es su reparación.
En el mantenimiento reactivo, cuando se produce una avería es necesaria una intervención de reparación. Sin embargo, la falla puede ser leve y puede no afectar la seguridad de los usuarios, ni la funcionalidad del activo. Sería, por lo tanto, una avería sin carácter de urgencia que requiere un mantenimiento reactivo y no de emergencia. Es en este carácter de urgencia que reside la principal diferencia entre el mantenimiento de emergencia y el mantenimiento reactivo.
¿Cuáles son los 4 pasos a seguir para un procedimiento de emergency maintenance eficaz?
Comencemos diciendo que la realización de una planificación cuidadosa del mantenimiento no elimina eventos excepcionales e imprevistos. De hecho, las probabilidades de que estos se manifiesten, a lo largo del tiempo, son siempre muy altas. Por esta razón, es una buena práctica proporcionar protocolos a seguir en caso de que surja la necesidad de intervenciones de emergencia. De esta manera, se minimizan los riesgos de seguridad y se evitan daños colaterales.
Por lo tanto, aquí están los 4 pasos a seguir para un procedimiento de mantenimiento de emergencia eficaz:
- identificar y definir las emergencias:
dependiendo de la estructura cuyo mantenimiento se está planificando, habrá ciertas situaciones que se considerarán emergencias y otras que, aunque urgentes, no tendrán el mismo carácter de emergencia; - definir el flujo de trabajo del mantenimiento de emergencia:
es necesario decidir cómo se informan, registran y abordan las situaciones de mantenimiento de emergencia a partir de un informe de falla que puede ser automático o manual; - describir los procedimientos de mantenimiento de urgencia:
es útil describir, al menos de manera general, los pasos a seguir en caso de que sea necesario intervenir de manera urgente. Claramente, el protocolo a seguir será diferente según el tipo de falla y las características del activo. En principio, los pasos generales podrían ser los siguientes:- aislar el origen de la avería para evitar daños colaterales;
- notificar a todo el equipo de mantenimiento y a todos los usuarios afectados por la avería;
- proceder, si es necesario, con la interrupción de la producción o del servicio;
- evaluar el alcance del daño y las condiciones generales del activo;
- planificar la intervención;
- realizar la intervención.
- implementar el software de mantenimiento adecuado:
automatizar la gestión y el mantenimiento de un activo mediante el uso de un programa GMAO. Esto ayudará a minimizar la ocurrencia de fallas inesperadas y acelerará el proceso de respuesta de la emergencia.
El mantenimiento de un activo, sobre todo si es complejo y de grandes dimensiones, puede reservar sorpresas imprevistas a las que responder con intervenciones de emergencia. Es fundamental que no nos encontremos desprevenidos y que conozcamos ya un protocolo general de emergencia.
Por esta razón, te recomiendo el uso de un programa GMAO eficiente y profesional que te ayude a planificar el mantenimiento, al tiempo que minimiza la ocurrencia de fallas inesperadas.